El Word Business Council for Sustainable Development (WBCSD), define ECOEFICIENCIA como:
“Proporcionar bienes y servicios a un precio competitivo, que satisfaga las necesidades humanas y la calidad de vida, al tiempo que reduzca progresivamente el impacto ambiental y la intensidad en la utilización de recursos a lo largo del ciclo de vida, hasta un nivel compatible con la capacidad de carga estimada del planeta”.
Se interpreta como “Producir más con menos” refiriéndose a la reducción en el consumo de materia prima, electricidad, agua y desechos, entre otros.
Son muchos los beneficios que la Ecoeficiencia proporciona al sector empresarial, entre ellos:
• Uso eficiente de los recursos naturales y la energía.
• Reducción de emisiones atmosféricas y vertidos líquidos.
• Reducción de costos de gestión de residuos.
• Disminución de riesgos de accidentes y costos de recuperación, con la consecuente reducción de primas de seguros.
• Ingresos adicionales por concepto de venta de residuos y subproductos.
• Aumento de la competitividad e innovación en la producción.
• Reputación y relaciones positivas con las partes interesadas.
¿Cómo puede la Empresa incorporar la Ecoeficiencia en sus procesos y actividades?
Varias son las vías a través de las cuales una Empresa, ya en operación o en la fase de diseño de sus productos o procesos, puede incorporar la Ecoeficiencia.
1. Aplicando el Ecodiseño en la concepción de sus productos. Ello implica reducir la carga ambiental asociada al ciclo de vida del producto que se está diseñando. Para ello Brezet, H y Van Hemel, C (1997) propusieron la Rueda de Estrategia de Ecodiseño que contempla ocho consideraciones al momento de diseñar: (1) desarrollo de nuevos conceptos, (2) reducción del consumo de materiales, (3) selección de materiales de menor impacto ambiental, (4) reducción del impacto ambiental de la producción, (5) optimización de la distribución, (6) reducción del impacto ambiental durante su uso, (7) Incremento de la vida útil y (8) Optimización del fin de vida.
2. Realizando Reingeniería de los procesos. Consiste en una revisión profunda y el Rediseño Radical, de procesos, con el propósito de alcanzar mejoras significativas en medidas críticas y de rendimiento, tales como costos, calidad, servicios y eficiencia. No pretende mejorar procesos ineficaces o ineficientes sino transformarlos radicalmente, parte de un papel en blanco, por ello de le concibe como Innovación. (Michael Hammer y James Champy, Reengineering the Corporatión, 2003).
3. Emprendiendo la Mejora de los Procesos. Consiste en un análisis sistemático del conjunto de procesos existentes en la empresa, en el presente, para detectar las actividades y prácticas que se pueden mejorar con el objetivo de hacerlas más efectivas, eficientes, adaptables y que agreguen valor a la organización. Para visualizar la mejora de los procesos y su alineación con la estrategia de la empresa, es fundamental disponer de indicadores de seguimiento y evaluación del desempeño. Para mejorar un proceso se aplica el ciclo de mejora continua de Deming PDCA (Plan, Do, Check, Act), equivalentes en español a Planificar, Hacer, Verificar, Actuar)
4. Integrada a la reingeniería y mejora de los procesos, la selección e incorporación de Tecnología de Punta que se traduzca en menor consumo de recursos, mayor eficiencia y reducción de impactos ambientales, sin duda alguna generará mayor rendimiento, disminución de costos operativos y de mantenimiento y reducción de riesgos de índole diversa.
5. Aplicar Tratamiento y Valorización Interna y/o Externa de Residuos en la Empresa conduce a la reducción de costos asociados a su gestión ineficiente y puede transformarse en una fuente de ingresos. Una vez jerarquizados los tratamientos que aplican a los diferentes residuos, la primera acción a considerar es minimizar su generación en los diferentes procesos, le siguen la reutilización, reciclaje y aprovechamiento energético. La Directiva 2008/98/CE de residuos (modificada por la Directiva (Unión Europea) 2018/851) define la Valorización como:
“La operación cuyo resultado principal es que el residuo sirva a una finalidad útil al sustituir a otros materiales que, de otro modo, se habrían utilizado para cumplir una función particular”.
El tratamiento y valorización de residuos puede realizarse dentro y/o fuera de la Empresa, apalancando el cambio de paradigma de una economía lineal a una circular, donde los residuos se transforman en recursos útiles para otros procesos a través de su vida útil generando valor.
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